Aprobados dos expedientes de contratación de obras de abastecimiento de agua en las provincias de Ávila y Salamanca por 700.000 euros

Consejo de Gobierno del 23 de marzo de 2016

Castilla y León | Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio

La obra de Navatejares, Ávila, presupuestada en 250.000 euros consiste mejorar el sistema actual de abastecimiento. Actualmente el municipio cuenta con un sistema constituido por una estación de tratamiento de agua potable y de unas conducciones que la unen con la arqueta de captación y con el depósito municipal que, sin embargo, no garantiza el caudal suficiente para dar servicio debido a la poca pendiente entre el punto de toma y la ETAP y las sucesivas roturas de la tubería.

Por ello, la obra que se va a realizar por parte de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente implica la captación de agua directa del río Tormes y la protección de la zona con muretes para impedir posibles arrastres. Para conseguir la elevación del caudal captado se ubicará un bombeo junto al río que constará de un depósito de aspiración en el que se instalarán dos bombas centrífugas sumergibles. Adosada se instalará otra pequeña arqueta donde se ubicarán las válvulas de control. El plazo de ejecución será de cinco meses.

La obra de la Mancomunidad Puente La Unión, en Salamanca, supone una inversión de 455.183 euros. El objeto del contrato es la construcción de una nueva conducción en paralelo a la actual, de manera que se aumente el caudal suministrado en verano a los municipios integrantes de la Mancomunidad. Se ubicarán válvulas de compuerta a lo largo de la conducción, así como ramales para desagüe. Y al inicio y final de la conducción se ejecutarán sendas arquetas en cuyo interior se colocarán válvulas de compuerta que permitan sectorizar la red. El plazo de ejecución es también de cinco meses.

El suministro actual de agua potable a la Mancomunidad Puente La Unión consta de una captación del río Águeda y una ETAP con capacidad de tratamiento de 60 m3/h; el agua una vez tratada es impulsada por tubería hasta los depósitos Majuelos I y II y desde allí, por gravedad, al depósito del Peñón. Sin embargo, la fuerte demanda de los meses de verano, por el incremento de población, obliga a impulsar el agua desde la ETAP realizando by-pass de los depósitos Majuelos. La conducción del agua que discurría por gravedad pasa a realizarse bombeando, lo que implica la inutilización de los depósitos y su capacidad de regulación. Si se produjera algún fallo en el suministro eléctrico de la ETAP o en los grupos de bombeo no se dispondría de volumen de reserva que permitiese el abastecimiento a la población.