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La residencia de personas mayores de Guardo, incluida en el nuevo modelo de centro residencial

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La residencia de personas mayores de la localidad de Guardo, de titularidad municipal, es uno de los 9 centros pioneros en la puesta en marcha de un nuevo modelo de centro para la atención a las personas mayores impulsado por la Junta de Castilla y León a través de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades. Próximamente se sumarán a estos otros 12 centros, tanto públicos como privados, de la Región.

25 de junio de 2013

Castilla y León | Delegación Territorial de Palencia

El delegado territorial de la Junta, Luis Domingo González; el alcalde de Guardo, Juan Jesús Blanco, y el gerente provincial de Servicios Sociales, Eduardo García, han visitado la residencia de personas mayores de Guardo. Tiene una capacidad de 180 plazas residenciales, de las cuales 75 son públicas concertadas por la Gerencia de Servicios Sociales. También dispone de un Centro de Día.

El avance hacia el nuevo modelo de centro residencial en Castilla y León, supone una oportunidad para generar empleo y crecimiento económico en la Comunidad, al mismo tiempo que garantiza una atención profesional de calidad. La implantación del modelo supone dos tipos de evolución en los centros residenciales.

En primer lugar, se trata de hacer posible que los centros puedan ofrecer todos sus servicios, no sólo a las personas que residen en ellos, sino a todas aquellas personas mayores de la localidad que deseen permanecer en su propio domicilio pero necesiten cierto apoyo para mantener su autonomía, por ejemplo, a la hora de elaborar comida, lavar la ropa, controlar la medicación, realizar cierta rehabilitación física o actividades ocupacionales. De esta forma, los centros residenciales podrán prestar estos servicios a las personas mayores que vivan en las localidades en las que están ubicados.

En segundo lugar, la atención que se presta a las personas mayores que residen en estos centros tiene en cuenta los deseos de los usuarios y se interesa por crear un ambiente lo más parecido a un hogar familiar. De hecho, según el modelo, se diseñan pequeñas unidades de convivencia con una arquitectura, un aspecto y una decoración similar a la de un hogar familiar. Este proyecto se denomina ‘En mi casa’.

Diversas investigaciones demuestran el hecho de que la mayoría de las personas a medida que avanzan en edad quieren seguir viviendo en su propia casa y evitar el ingreso en un centro residencial. No siendo siempre esto posible, lo que se plantea es hacer de la vivienda alternativa un lugar grato y confortable, lo más parecido al propio hogar, en el que la persona siga manteniendo el control de su vida, se respeten sus decisiones, y no se interrumpa de forma brusca su proyecto y modo de vida anterior.

La propuesta de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades apuesta por un nuevo modelo de derechos que pivota sobre el principio de autodeterminación de la persona y que trata de superar el modelo residencial actual basado en la satisfacción de necesidades y provisión de cuidados, fundamentalmente asistenciales y sanitarios.

Las ventajas de este nuevo modelo de atención para las personas mayores en residencias se pueden resumir en que: viven en un entorno con dimensiones de “hogar”; disponen de muebles y elementos decorativos que ellos mismos aportan o eligen, por lo que tienen valor y significación para ellos; las rutinas de cada unidad se establecen desde el respeto por los gustos y necesidades de las personas que residan en ella; reciben una atención personalizada y estable, ya que los profesionales que atienden en cada unidad son los mismos, favoreciendo la relación entre estos y los residentes; cada residente tiene un profesional de referencia que le conoce bien como persona y le ayuda directamente en todo lo necesario; la organización favorece el establecimiento de lazos de convivencia con las otras personas de la unidad, y las familias tienen una participación directa y muy activa en la vida de la unidad, pudiendo compartir con sus familiares tiempo y actividades.

El pasado 26 de abril este nuevo modelo de atención comenzó su andadura en nuestra provincia con una unidad de convivencia compuesta por 13 personas mayores residentes en el centro de Guardo. A ellas y a sus familias se les presentó el proyecto y aceptaron formar parte de esta experiencia de manera voluntaria. A pesar del corto espacio de tiempo en el que viene funcionando, ya se ha constatado un considerable aumento del nivel de satisfacción mostrado por los usuarios y por los trabajadores que se ocupan de su atención.